El tiempo

Con mis manos hice
un cáliz de magia con el tiempo:
detuve sus manecillas
me comí sus segundos con alegría y empeño.

Detuve el tiempo entre mis labios
entre mi vida y mi cuerpo:
lo hice para decirte que te amo
lo hice porque era preciso hacerlo.

Y a pesar de que los dioses
pudieran molestarse con mi osadía
volveré a parar el tiempo
cada vez que escriba tu nombre
y te envíe un beso con el viento que acaricie tu cabello.

Este día paré otra vez el tiempo por tí,
amor mío,
y te juro que fui la Eva más feliz sobre la tierra
y te juro que no me arrepiento.

Colisiones planetarias

Yo sé bien que por ser una enamorada
ante cualquier calamidad me sostengo.

Es mi suerte, mi bendición del cielo
tener este amor que me sostiene:
podrán acabarse los mundos
los relatos, la poesía y los cuentos.

Pero nunca este amor que por tí siento
uno que nació hace un año
un treinta y uno de enero
con la colisión de tu planeta y el mío
con el colapso de mis amarguras
y la transmutación de mis desvaríos
en amores-palabras
en corazones que hasta ti viajan contentos.

Celebración

Como un prisma perfecto
así eran tus ojos detrás de tus anteojos.
Como un universo paralelo
como una galaxia sacada de un libro de cuentos.

A tu aura me dirigí
a ciegas y otra vez renaciendo:
te mostrabas retraído ante lo absurdo
y te movías frenético en tu pensamiento.

Me envolviste en tus brazos de tu cuerpo etéreo
de un sólo tajo y para siempre
devolviste mi alma a mi cuerpo
y dejé de ser una mujer triste y silente.

Y todo ocurrió un jueves frío
el treinta y uno de enero.

*****************************************

Y desde entonces
he navegado por tu sangre
tu corazón infinito
tu luz inagotable.

Ya las lunas saben a dulce
y por ti se calmaron mis mares;
yo aprendí a ser sensual y flor
y hoy me muestro ante tí
honesta con corazón para tu nombre.

Volví a bailar al salir de ese recinto
una estrella me dijo
que tú eras lo que yo quería.

Y a tí me consagré en silencio, amado mío
un silencio que suena a estas letras.

Por tí conozco a Amor
como es y a mi medida.
Por tí tengo una ilusión para ser trapecista
en esta ilógica vida.

Soy muchos besos
quisiera ser los brazos que te arrullan
que te amen, acaricien y sostengan.

Ruego a tu luz que nunca te alejes de mi existencia
ruego por la permanencia
de esta feliz y afortunada coincidencia.

Alabo tu caída de ángel desprevenida
y alabo aún más
tu existencia.

Amo tu aliento a flores que maduran lento
amo que seas guerrero
amo la inocencia que llevas por dentro.

Amo tu perfección en lo imperfecto.

Aprendí a ser gigante para ver cómo palpitas.
Y todo fue un treinta y uno de enero.
Y fue porque yo ya lo merecía.

Benedicción

Yo no sé qué haría
si la vida me hubiera cambiado la suerte de no verte:
seguiría errante y aburrida
mi carne sería un trozo de guerra inerte.

Bendita sea tu luz,
amado mío,
porque después de ti dejé de ser ciega,
porque te toco las ideas
y me dejas que te entregue enterito mi corazón.

Yo no sé qué haría
si la vida me hubiera puesto a la distancia ese día:
sería una flor marchita
un jarrón sin voz.

Benditas sean tus manos
tus caricias.
Bendita sea la suerte mía
de escuchar el tambor de tu libertad.
Bendita mi oreja escucha
que detectó tus pasos firmes;
benditos mis pies que te siguieron
porque desde entonces
conozco la verdadera felicidad:

Amarte. Sentirme que soy una mujer de verdad.

En verdad os digo

A todo aquél
que sienta que vivir es un sucedáneo
lo invito a que conozca mi historia
les presento a mi ángel de la guarda.

Su nombre es una conquista
con sus cuatro tonos enciende en mí la flama
para ser cometa que se distiende
por desiertos y valles resecos
por cordilleras hechas casas
y por su piel iluminada
producto de su blanca aura.

A todo aquél
que piense que amar es perder el tiempo
mire a esta emancipada del letargo del olvido
admire esta pieza como sacada de un libro etéreo:

Ahora cruce bien los dedos
haga toda suerte de peripecias
y espere por un poco de virtud del Creador.

Verá
que al pasar varios tragos amargos
tendrá la suerte de encontrar su propio ser alado
y vendrá a decirme que es cierto
que hay ángeles que bajan del cielo
y nos besan hasta depurarnos el veneno.

Tenga fe en la vida:
el amor es para quien lo necesita
pero necesitar es merecer.
Vuélvase estoico o valemadrista.

En verdad os digo
que el amor existe
haga una solicitud al cielo
póngase de cabeza ante el mundo
llore en silencio.

Haga como yo
vea bajar a su propio ángel
mandado desde el cielo.
De un salto amoroso de fe en lo que mira y siente
y verá que el amor es cierto.

Si...

Y si bailaras de repente
con la música que eres y llevas por dentro
toma mi mano y besa mi frente
que yo presta mi cuerpo a tus movimientos
te entrego.

Y si leyeras de pronto
un texto como salido de otro espacio
algo que te exhorta a buscar el por qué
de tu imperfección siendo para mí perfecto,

Escríbeme en las nubes
en tus travesías, el aire hecho viento
o en lo que a tu imaginación le plazca:
por amor hasta los sistemas braile leo.

Y si sintieras de golpe
que dos corazones te laten fuerte y muy dentro
entérate que estaré llorando felicidad desde mi cetro
uno de ellos es mío
y que lo tengas tú es un magenta entre grises
es un honor que sea sólo tuyo
mi niño guerrero.

Para leerse hoy

Gracias por abrir
un espacio para esta necia
que no sólo vive para amarte a tí
pero que de amarte
encontró que es verdad
que la vida no es tan negra
cuando alguien como tú
te toca con su luz
y hace que suene la más bella orquesta.

Me presenté como amorosa del amor
y te pago como enamorada de tu esplendor
podría perder cualquier cosa
menos la fortuna de amarte a diario
y de la nada
menos la fortuna de ser en tus manos lejanas
la más excéntrica mariposa.

Arte Poética

Hay ojos-pies
que te abren puertas dimensionales
le cierran el paso al heroico yo
al tiempo de los relojes y a otras malsanidades.

Hay manos-piernas
que te sacuden las restricciones:
pasas de monito plástico
a romántico sin inhibiciones.

Con él me pasa
que yo ya no me encuentro a mí
sin mí hablando de las punzadas.

Latidos que recorren mis uñas
hasta la materia gris
que a su lado se vuelve blanca
-como nuestra distancia-.

Antes de él,
vivir la poesía era estar triste
envenenada o frustrada.
Dentro de él
vivo la poesía como una emancipada:
escribo amor y erotismo
a plena luz del día
y sin vergüenzas prefabricadas.

Voilà a mi adicción
por escribirle "te amo"
en todas sus formas
y con todas las palabras
es el arte poética de mis venas
la inventio que me moldea
merced de sus manos en cuarentena
con mi raíz en su existencia
casi como bendición cantada.

Recado sabatino (para receptor único)

Te doy las gracias porque respiras
porque cuando pienso que yo ya no puedo
me sales tú como salido de un cuento de hadas
con tu mal humor y tu sentido agudo de lo injusto
con tu disposición a ser otro para cambiar al mundo
con esa luz que Dios te regaló.

Yo no sé qué haría sin tu voz:
me columpiaría autista por la vida
me arrojaría al viento de la memoria
me dormiría esperando el final.

Y porque son tantas las cosas que me das
yo sólo tengo amor para ti;
distante o cercano, el amor te lo entrego intacto
pensamientos y caricias incluidos
junto con te quieros y te amos de facto.

Mis acciones son palomas
que vuelan hacia ti a todas horas:
por ti soy amor y por ti me enciendo
recibe mis besos de amor desde aquí.

Instrucciones

Si te sientes triste
o agobiado
abre tus pulmones
al viento que te pide
tu atención de prestado;

Y pídele que te entregue
lo que por tí cada día
cada noche
pongo en sus brazos:

Es el abrazo infinito de amor eterno
el que no te cura tus males
ni pone fin ni remedios
sólo te ama y te bendice por ser
un pedacito de azul y claro cielo
en este mundo gris
que tú y yo sabemos
no es eterno.

Es la carta silente y perenne de amor
que te entrego en mis horas vivas
por si algún día falto
por si algún día a otras galaxias
me voy con la mochila encima;

O por si simplemente no hay forma
de decirte lo mucho que me importas
que contigo y por tí
cambió el significado de mi vida.

Pide ese abrazo de amor
vale por todos los días
pues todos los días te amo
y este día se repite
cada vez que digas hoy.

Lux

La luz se formó en ti
para que tu linaje de ángel
yo recordara;

Te delineó de pies a cabeza
para que la tristeza
en mí nunca llegara;

Y entendiera, al fin,
que la humanidad tiene destellos
de pureza e inocencia.

Que puedo confiar en la humanidad
mientras tú me des la fuerza
para persistir en ella.

Tu luz se filtró en mí
para que de amargura
yo no feneciera.

(Y que después de tantas piedras
en mi corazón vuelva a crecer
un jardín con las flores
que nacen en mí con tu ser).

La luz se formó en ti
poco antes de que yo naciera
para tener el tiempo, sí,
de envolverme en ella;

Y ser lo que no pude ser sino en tí
Niño solitario, dorado de pureza.

La luz se formó en tí
para que al Creador agradeciera
tu existencia en mi hora justa;
para evitar
que yo lo desconociera.

La luz se formó en tí
y yo soy una luciérnaga.

Tu nombre es un Edén

Tu nombre es mi Edén:
salí rumbo a los infiernos
cuando crecí y vi mi inocencia fenecer.

Anduve entre mantos de lágrimas
y corazones escarpados
y como algo dolorosamente inesperado
crecía la maleza entre mis labios.

Hasta que topé con tus raíces
y tomé de tu agua la vida nueva;
mis manos florecieron como madreselvas
y mi cuerpo de azahares
enterito se cubrió.

Fue la magia de tus cuatro sílabas en flor
las que me bajaron de la cruz
y entre tu luz me envolvió
la dulce esperanza que borró mis memorias;

Eres el agua dulce de la jamás probada noria
sólo a las mujeres-ave
se les anuncia tu existencia
y una de ellas soy yo.

Tu nombre es un Edén
y yo bendigo tu amor.

El canto

Éste es el canto
que quita de la frente los agobios
y de los mares de aguas turquesas
-como tu nombre-
destierra los oprobios.

Éste es el beso de este día
un barquito de niño en día de fiesta
cinco historias adentro
lo demostrarán.

La primera cuando te supe en la tierra;
la segunda, cuando supe que eras esa estrella;
la tercera, cuando te perdí de cuenta;
la cuarta, cuando toqué otra vez a tu puerta
y la quinta, en la que ahora me ves y estás.

Éste es el canto
para el ave más sabia de mis días;
si supieras cuánto haces en mi vida
comprenderías
aún sin memoria previa y a ciegas
la magnitud real
de mi amoroso palpitar.

La lista (numerus clausus)

Que no se vaya el recuerdo
de lo que no fue aciago y triste
que no se vayan los momentos
en que sinceramente sonreíste.

Te permito que se vayan
los sinsabores y los negros horizontes
acaso un mal de amores
un camino en la bifurcación del destino
a pesar tuyo y con todos sus colores.

Pero que no se vaya lo bueno
ni siquiera el sabor amargo del sereno
pues sin él no existiría
el sabor tierno que la felicidad envuelve
cuando te abraza y canta en silencio.

Y que no se vaya tu voz
el arpa de tu alma en este mundo
que no se vayan tus dedos puntiagudos
ni la caja de música
que llevas por corazón.

Que no se vayan las buenas nuevas
hartas ya de esperar a que las recibas;
que se vayan
-aunque sea por un sólo día-
las peras al olmo que afuera no registras.
Te permito, tal vez,
que se vayan la gastritis, la migraña
y las agruras.
Pero que no se vayan los lunares del sol
ni las arrugas
pues son caminitos que delatan tu paso
por esta tierra
es lo que te vuelve humano
es tu patente de esta vida sin certeza.

Y que nunca se vaya, también,
la magia de respirar oxígeno entre lo impoluto
de volar a pesar de los grilletes de este mundo
de pensar que un día fuiste ángel
y como ángel
debes renacer respirando hoy.

Primero de Enero (El uno del uno)

No me cansaré de repetirme a mí misma
todo ese mar que para mí es un
te amo;

Pues cuando pienso en tí
la primavera regresa
tan pronto le abro la puerta
a tus rizos dorados
y a tu sonrisa etérea.

Este día se hizo para viajar sin maletas
yo he elegido tus brazos
tu cuerpo
tu sangre completa
para que me sientas viva sin verme
por las avenidas de tu estancia aquí en la tierra.

Elijo, sí
amarte cuanto pueda
cuantas veces el uno del uno
se repita:
Janvier significa inicio
y yo inicio la segunda parte
de este cuento que me tiene
a tus pies, a tus manos
y a tus ideas
atada sin que yo me resista
enamorada a ti
sin que llamaras a mi puerta.