A todo aquél
que sienta que vivir es un sucedáneo
lo invito a que conozca mi historia
les presento a mi ángel de la guarda.
Su nombre es una conquista
con sus cuatro tonos enciende en mí la flama
para ser cometa que se distiende
por desiertos y valles resecos
por cordilleras hechas casas
y por su piel iluminada
producto de su blanca aura.
A todo aquél
que piense que amar es perder el tiempo
mire a esta emancipada del letargo del olvido
admire esta pieza como sacada de un libro etéreo:
Ahora cruce bien los dedos
haga toda suerte de peripecias
y espere por un poco de virtud del Creador.
Verá
que al pasar varios tragos amargos
tendrá la suerte de encontrar su propio ser alado
y vendrá a decirme que es cierto
que hay ángeles que bajan del cielo
y nos besan hasta depurarnos el veneno.
Tenga fe en la vida:
el amor es para quien lo necesita
pero necesitar es merecer.
Vuélvase estoico o valemadrista.
En verdad os digo
que el amor existe
haga una solicitud al cielo
póngase de cabeza ante el mundo
llore en silencio.
Haga como yo
vea bajar a su propio ángel
mandado desde el cielo.
De un salto amoroso de fe en lo que mira y siente
y verá que el amor es cierto.
viernes, 30 de enero de 2009
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