miércoles, 18 de febrero de 2009

A las cosas buenas

A las cosas buenas
no se le ponen peros
ni se le preguntan cosas tontas
como lugar de procedencia
ni por qué razones
en nuestro patio que es la vida han caído.

Yo por eso no pregunto
por qué la dicha de conocerte
en el momento justo
y para amarte siempre:

Simplemente me dejo ser
simplemente permito
que tu sol me alimente.

A las cosas buenas no se les pregunta
los cuándo ni los dónde:
se toman,
como yo tomo tu elíxir a diario
siempre que tú me lo permitas,
se huelen,
como tu aura en mi espacio
cada vez que tus ojos se despiertan,
se saborean,
como lo hago yo con el sabor de tu nombre,
mezcla de agridulce y eterno,
se oyen,
como oigo tu corazón respirando en este mundo,
una sinfonía única y sólo la escucho yo,
se miran,
como miro a través del espacio-tiempo:
soy super chica sólo para mirarte,
contemplar tu nobleza,
mirar lo que vives mientras sueñas hoy,
vuelan,
como lo hace este corazón alado,
tan chiflado y enamorado de tí,
se besan,
como te beso cada vez que te escribo:
sean mis letras el erotismo y la ternura
que experimento dentro de mí y por tí.

Se aceptan, se agradecen,
se aman, amor mío,
se aman como un regalo bendito:
eres el claro angelito
que hace de mis días
la luz.

No hay comentarios: