miércoles, 4 de marzo de 2009

Alza tu mirada y canta

Por todas las mañanas que te faltan
para vibrar con esa sonrisa de niño que no quiere
del sueño del equilibrio despertar
por los desencantos, y por el doble de alegrías
por el montón de letras que te quedan por redactar;

Por los paseos con rumbo a los recuerdos
por los misterios que no se nos han revelado
a los humanos
por la capacidad de cambiar de ánimo
sin dejar tu motor principal.

Por las nubes que traerán la lluvia
y por las tardes de flores, de selvas y de tundras
por las cosas buenas que siembras
y las que cosecharás.

Por la vida, hombre,
por esta parte que se adhiere a tí
como si de un cometa recolectando luciérnagas
se tratara:

Alza tu mirada y canta
como lo hacen las estrellas incluso en el día
porque dos como éste cuatro del tres
en este año no se repetirán.

¿Verdad que es lindo mirar
la tierra azul con puntos blancos y refulgentes
y el cielo con olor a barro
en este día tan especial?

Que la luz en tí jamás se extinga
y que a mí nunca se me terminen las gracias
por haber encontrado un ser como tú
a mitad de mi vida, de esta vida rara
pero que se debe amar
con la intensidad que cuando se era pequeño
y no temíamos a la realidad.

Por eso y por todo lo demás,
alza tu mirada y canta, guerrero noble,
como lo hacen las estrellas incluso en el día
porque dos como éste cuatro del tres
en este año no se repetirán.

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